Cada vez más las empresas quieren ahorrar en costes sin renunciar al servicio. Con el «just in time» se consigue trasladar el coste de almacenaje al proveedor: tu lo almacenas pero me lo sirves justo cuando lo necesito. Lo tomas o lo dejas. El pez grande obliga al pequeño a que acepte sus condiciones.
En la selección de personal está empezado a ocurrir lo mismo. Ya hay empresas que te entrevistan, te realizan baterías de psicotécnicos e idiomas y certifican tu perfil profesional por un módico precio. Los contratantes ya tienen, de forma gratuita, una bolsa de candidatos preparados y certificados para su última entrevista.
Otras empresas como Experteer, por unos 15 euros al mes, hacen llegar tu currículum a head hunters de toda Europa y te dan acceso a las ofertas de trabajo.
Desde el punto de vista de la empresa contratante son todo facilidades. Puedes colocar tu oferta de trabajo, siempre que cumpla unos requisitos mínimos de calidad, y tener acceso a un gran número de candidatos que en principio se supone que cumplen con el perfil. Supongo que para las empresas también existe un servicio Premium, con el que tendrán una mayor posibilidades, pero no he podido descubrirlas.
Lo innovador del modelo de negocio de Experteer es que traslada el cobro de sus servicios al candidato. Con este pago mensual se pretende, por un lado, hacer un negocio rentable, y por otro, desincentivar a los candidatos que no cumplan con el perfil buscado.
Para un directivo, los 150 € anuales (aproximados, en función del plan que se contrate) ¿son un gasto o una inversión?
¿Cómo pueden aprovechar las pymes las redes sociales en su gestión de personas?
El pasado 20 de marzo de 2013 participé como ponente en el evento: Claves para el Desarrollo Empresarial basado en las Personas. Hablé sobre las redes sociales, el branding de las empresa, la reputación digital… bajo el título ¿Cómo pueden aprovechar las pymes las redes sociales en su gestión de personas?.
¿Cómo se pueden aprovechar las redes sociales en la Gestión de Recursos Humanos?
¿Cómo utilizan las empresas las redes sociales?
Las redes sociales comenzaron como un espacio web de ocio. Sin embargo, con el paso del tiempo, este concepto ha ido evolucionando. Las redes sociales cada vez tienen más importancia para las empresas, tanto en el área de marketing o de recursos humanos, como en otras áreas que podrían parecer más atípicas, como la financiera o la de producción.
Llevamos tiempo viendo que con las redes sociales se consigue llegar al cliente, ganar en notoriedad y hacer branding. También sabemos que se están utilizando, en especial Twitter, como canal de atención al cliente. Desde el punto de vista de la reputación esto es fundamental. La gestión de la reputación tanto de forma proactiva, con la publicación contenidos de valor para mis clientes que tengan cierta relación con mi marca; como de forma reactiva, dando contestación a los comentarios que la afectan, va a consolidarse como un punto estratégico para la supervivencia de la empresa.
Con las redes sociales de carácter profesional, que son las que están enfocadas para los negocios y el networking (como Linkedin), y con las redes sociales verticales, que son las que están formadas por personas con perfiles muy focalizados en un tema concreto como en FormadoresEnRed, (proyecto en el que tuve el placer de trabajar como Social Media Strategist), se han abiertos grandes posibilidades para la búsqueda de talento. Ahora las empresas consiguen localizar de una forma ágil y económica a los mejores candidatos, a los verdaderos expertos en sus materias.
También están apareciendo plataformas tecnológicas como InvestBan, donde se ponen en contacto inversores y empresas que quieran ampliar su capital, o Rockthepost, en donde se facilita a las start-ups a encontrar financiación, colaboradores y materias primas.
Como ya hemos dicho, las empresas también pueden ayudarse de las redes sociales para mejorar sus productos o servicios. Es el llamado crowdsourcing, la multitud que colabora con sus ideas. Ya existen redes sociales como Needish, enfocadas de manera plena al crowdsourcing. Aunque también se puede utilizar Facebook para canalizar las nuevas aportaciones de los clientes.
Cada día que pasa, afortunadamente, nos encontramos con más empresas en las redes sociales que utilizan, de mejor o peor manera, las posibilidades de la web 2.0. Ahora sólo hacen falta profesionales bien formados que estén a la altura de las circunstancias y que puedan guiar a las empresas en este apasionante camino.
La empresa no puede permitirse el lujo de dejar sin contestación ningún comentario negativo que afecte a su marca. Siempre tiene algo que decir. Eso si, también hay que ser conscientes de que contestar con la indiferencia y con el silencio, especialmente cuanto nos enfrentamos a un troll, también es una forma de comunicar.